Envejecer no significa perder interés en el sexo.
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A pesar de que en la tercera edad nos enfrentamos a ciertas dificultades físicas y estigmas sociales para tener relaciones sexuales, no quiere decir que tengamos que suspender tal actividad una vez que llega la madurez, por el contrario, basta con realizar adaptaciones que nos permitan seguir disfrutando del sexo de una forma más consciente y evolucionada.
Algunos informes apuntan que el sexo mejora con la edad y que a partir de los 40 es cuando se goza de mayor experiencia, creatividad y libertad.
Diversos estudios sugieren que es en esta etapa de la vida cuando el placer sexual resulta más satisfactorio, a continuación te contamos por qué:
- Al haber vivido más, las personas se conocen más a sí mismos, al igual que sus preferencias sexuales.
- Se pierde el temor al embarazo por lo que el placer sexual se convierte en el objetivo.
- Se cuenta con mayor experiencia y mayor deshibinición para hablar de lo que nos gusta en la cama.
- Las relaciones suelen ser más afectivas por lo que las caricias, los abrazos y los besos se convierten en protagonistas
- A medida que pasa el tiempo se desarrollan conocimientos y habilidades que mejoran el encuentro.
- Hay mayor apertura a probar nuevas experiencias
- La atracción sexual no se basa solo en el aspecto físico dando paso a aspectos más íntimos.
- Existe menos presión con respecto a los papeles del sexo y a las expectativas.
- Ante las dificultades a la hora de tener relaciones, la comunicación y la creatividad pasen a ser mucho más importantes.
El sexo en la tercera edad, puede suponer nuevos desafíos, sin embargo, hay soluciones alternativas que logran en muchos casos que el sexo sea tan placentero como lo era antes o incluso más.